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Empezar de nuevo
Rodolfo MARTÍN y Mildred MARÍN, corresponsal / Al Día
Manuel Antonio. El capitán Saúl Quirós está dispuesto a luchar para empezar de nuevo. No solo tiene que acostumbrarse a volver a caminar libremente sino a conciliar el sueño en su propia cama.
Ayer en la mañana, tras pasar su primera noche en casa, desde el 19 de junio cuando zarpó a mando del “Fu Fa Chen” y tras 25 días de estar a la deriva, reconoció que “acostarse fue muy difícil. Estuve demasiados días sentado en las boyas”.
“Caminé 50 metros para ir donde unos vecinos y duré una eternidad. Me falla el equilibrio”, confesó.
Su esposa, Ana Valverde, tampoco pudo dormir. Pasó la noche acariciándolo, como para asegurarse de que no estaba soñando.
“Si acaso dormimos dos horas. Seguro pensaba que estaba todavía en al agua porque estaba muy sobresaltado. Solo le decía: "Papi, aquí estoy yo. Ya todo está bien, ya nada le va a pasar”.
“No podía dejar de pensar en todo lo que pudo haber pasado. Aunque vuelva a tenerlo a la par todas las noches de mi vida, no volveré a estar tranquila; menos si vuelve al mar”, dijo Valverde.
“Ahora soy una persona renovada, más espiritual. Esto me enseñó a ser más humano; quiero convertirme en pilar y sostén de mi familia. No sé cual será mi futuro, quiero reflexionar y preguntarle a Dios qué me tiene”, dijo.
Por lo pronto, reveló, hoy irá a Puntarenas a reponer su permiso de pesca, que quedó perdido en el mar.
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